Los tiempos cambian. Hoy, y sin apenas darnos cuenta, el estilo de vida de muchos de nosotros ha cambiado. La relación con los vecinos, con el pueblo y con tu entorno de trabajo ha dado paso a un desconocimiento de las personas que viven a tu alrededor y trabajos que cada vez se cierran más entre una o dos pantallas de ordenador. Esta vida ya lleva consigo un aislamiento que, desgraciadamente, dura más de un mes. A veces, toda una vida.
No obstante, existen personas que se resisten a vivir un aislamiento como al que nos expone el mundo moderno. Existen iniciativas de convivencia como el cohousing, así como métodos pedagógicos alternativos. En ComparteTuPiso ofrecemos una mediación a través de la cual las personas pueden encontrar algo más que un/a compañero/a de vivienda. Encontramos personas que se adapten a la situación que estás viviendo y a tu perfil personal para dar la posibilidad a muchas personas de compartir su vida con los demás.

Cerrar las puertas para abrir los ojos
El estado de alarma en el que nos encontramos desde el 14 de marzo nos ha obligado a todos a quedarnos en casa. Ha sacado el lado solidario de muchos para ayudar a contener la pandemia. También nos ha dejado tiempo para reflexionar si realmente estamos conectando con los demás en nuestras vidas. Si queremos que nuestra vida se convierta en algo parecido a este confinamiento.
Muchas personas que tienen su familia y amigos lejos y trabajan en grandes ciudades se encuentran ahora solos en casa. Son algunas de las personas que están notando más las consecuencias de la vida moderna y el aislamiento al que nos vemos expuestos.
Toda una vida de aislamiento
Desde que nacemos nos sientan en un pupitre, al lado un/a compañero/a con el que compartimos 6 horas en silencio y media hora de juego. Terminamos la escuela, el instituto, los estudios superiores y comienza nuestra vida laboral, que no es muy distinta a la escolar. Nuestra vida, tan ocupada, apenas nos deja espacio para compartir nuestro tiempo, nuestra vida, con los demás, algo que da realmente sentido a nuestra vida.
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